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Informe del estado del mercado social catalán

9 de noviembre de 2015

La economía solidaria genera 123 millones de ingresos y 3.400 empleos en Cataluña

La economía social y solidaria catalana genera 123 millones de euros en ingresos, da trabajo a 3.400 personas e implica hasta a 133.000. Estas son las principales cifras de un informe elaborado por la Xarxa d’Economia Solidària (XES) a partir de los datos del balance social que realiza esta misma red a organizaciones del sector. Se trata, según los autores, del primer esfuerzo investigador para cifrar, radiografiar y dar visibilidad a la economía social y solidaria en Cataluña


La economía solidaria genera 123 millones de ingresos y 3.400 empleos en Cataluña
Ecosol, la moneda social de la XES  

La XES aprovechó la pasada feria de economía solidaria para presentar en sociedad el estudio sobre el estado del mercado social catalán. Se trata, según esta misma red, del “primer esfuerzo investigador” sobre este ámbito. Aunque la intención es convertirlo, a partir de ahora, en un informe anual que permita consolidar una metodología y sistematización de recogida de datos, genere un espacio de debate en relación al concepto y a las prácticas del mercado social y la economía social y solidaria, sirva para recopilar y mantener una contabilidad agregada del sector y, al mismo tiempo, lo provea de una herramienta que le dé visibilidad.

El estudio define el mercado social como la plasmación práctica de un circuito económico y de satisfacción de necesidades basado en los principios de la economía social y solidaria, cuya construcción, dice, se basa en la creación de “círculos virtuosos de economía social y solidaria” desde la potenciación de los intercambios y flujos económicos entre empresas. En este sentido, se identifican como principales herramientas para construir este circuito el balance social, un sistema de certificación que pretende evaluar el comportamiento de las organizaciones y potenciar los procesos de mejora, ’Pam a Pam’, una mapa en línea del sector en el cual aparecen ya más de 245 puntos, la Feria de Economía Solidaria, y los encuentros de intercooperación como espacios de conexión e intercambio entre organizaciones. Y también cita procesos que se desarrollan dentro de la XES como las dinámicas de intercooperación sectorial (ya hay seis redes en funcionamiento; restauración cooperativa, TIC, arquitectura y servicios ambientales, monedas sociales, periodismo y finanzas éticas) y las de articulación local o territorial (hay al menos cinco redes locales en funcionamiento: XES Empordà, XES Terrassa, XES Bages, XES Terres de Lleida y XES Barcelonés Norte).

El impacto de la ESS

La XES se basa en los datos recogidos en el balance social -y que aportaron 72 organizaciones- para estimar que sus 159 entidades asociadas generan unos ingresos de 123 millones de euros y dan trabajo a 3.400 personas. Abriendo un poco más el foco, el estudio asegura que el mercado social catalán implica, en total, a unas 133.000 personas. Según el estudio, el 42% de los ingresos los aportan las fundaciones y las asociaciones, mientras que el otro 58% se divide casi a partes iguales entre cooperativas, sociedades laborales y sociedades limitadas, por una parte, y asociaciones y cooperativas de segundo grado y de consumo, por otra.

Sus 159 entidades asociadas generan unos ingresos de 123 millones de euros y dan trabajo a 3.400 personas

En lo que se refiere a ocupación, son el grupo formado por cooperativas, sociedades laborales y limitadas las que más generan (el 53% del total). Las asociaciones y fundaciones, por su parte, aportan el 38% de los empleos, mientras que las asociaciones de segundo grado y las cooperativas de segundo grado, de consumo y de servicios representan sólo un 9%.

Por lo que respecta a la generación de masa crítica, el 98% de personas implicadas lo aportan a partes iguales asociaciones y fundaciones, por un lado, y asociaciones de segundo grado y cooperativas de segundo grado, de servicios y de consumo, por el otro. Las cooperativas de trabajo y sociedades laborales y limitadas representan sólo el 2% de estas personas, la mayoría de las cuáles son trabajadoras.

Extrapolando los datos de las organizaciones que aportaron su información al balance social, la XES llega a la conclusión que los sectores de actividad con más peso en el mercado social son los servicios a las personas y a las empresas, aunque su porcentaje se ha reducido ligeramente respecto a 2013. También tienen un poco menos de peso las organizaciones de servicios de comunicación, sociales y culturales, y las de cooperación. Por contra el porcentaje que representan las organizaciones dedicadas a la producción industrial y la construcción, el comercio, los servicios ambientales y los financieros ha aumentado.

El comportamiento de las organizaciones

Además de aportar cifras, el estudio hace una radiografía del comportamiento de las organizaciones de la economía social y solidaria de Cataluña basándose en las encuestas a las que han de someterse las iniciativas que aparecen en el mapa colaborativo del sector, ’Pam a pam’. El estudio destaca, por ejemplo, que la base laboral de las cooperativas de trabajo presenta un elevado índice de movilización y hasta un 45% de las personas que trabajan participan en la toma de decisiones estratégicas.

También se analizan varias cuestiones de género. Así, el informe constata que el grado de paridad en las entidades, tanto en la toma de decisiones como en la base social, es prácticamente total. Lo que no está extendido aún en las organizaciones de la economía social y solidaria de Cataluña es la introducción de los afectos, los cuidados y las emociones a la toma de decisión y de organización colectiva. En relación a la igualdad salarial, las diferencias medias en estas entidades son del orden de 1 a 2, lejos del máximo establecido por la XES en su propuesta de ley catalana de ESS, que es de 1 a 5.

El grado de paridad en las entidades, tanto en la toma de decisiones como en la base social, es prácticamente total

Las prácticas de cuidado con el medio ambiente más extendidas son la recogida selectiva y el uso de papel reciclado. Las menos habituales son la compra de productos de oficina e higiene con certificación ecológica así como el ahorro y la eficiencia energética. Por otra parte, el compromiso social de las organizaciones se concreta en vinculación con el tejido social y activista local, pertenencia a redes y federaciones transversales de carácter sociopolítico, fomento de la inclusión social y donación de los excedentes de la actividad empresarial a proyectos sociales.

El informe también aporta datos sobre el compromiso con la construcción del mercado social. El 13% de los depósitos y el 50% de los préstamos recibidos por las organizaciones de la economía social y solidaria provienen de entidades de finanzas éticas. Además, el 11% de las compras de empresas del sector provienen de otras organizaciones el circuito. Las encuestas de Pam a Pam también destacan el elevado compromiso de las entidades del sector con la compra en circuitos de proximidad y con el comercio justo.

En cuanto a la calidad laboral, el informe recoge cuestionarios anónimos de trabajadores en los que el soporte mutuo, la satisfacción por pertenecer a las respectivas organizaciones, los buenos equipos humanos, y la autonomía y flexibilidad para organizarse el trabajo aparecen como las aspectos más valorados por los empleados. Los menos valorados son las condiciones económicas y materiales que enmarcan el trabajo.

Reflexiones sobre el mercado social

El estudio elaborado por la XES se cierra con un apartado de conclusiones y reflexiones en el que se apuntan ideas como la necesidad de homogeneizar las metodologías para generar una base estadística que permita conocer el abasto del mercado social catalán y fijar metas de expansión. Otras de las recomendaciones son la incorporación de valores femeninos en las organizaciones de la economía social y solidaria catalana y la extensión de las finanzas éticas y los proveedores de la economía social y solidaria. También se apunta que, para que el mercado social se expanda, las organizaciones que lo conforman tienen que poder ofrecer productos y servicios que motiven un consumo por algo más que por pura militancia de quien los compra.

Podéis leer y descargar el informe completo en catalán aquí.

Paula Mateu  

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